Después del éxito de la 1ª Masa Crítica Galega en Santiago de Compostela, el pasado sábado 27 de septiembre de 2008 nos juntamos en Ferrol un buen número de “maseiros” para celebrar la segunda MCG. En un día soleado y sin viento nos concentramos poco a poco, desde las once, en el punto de reunión y salida, el
embarcadero de Curuxeiras; hasta allí fuimos llegando los distintos grupos de ciclousuarios, de Ferrol y Coruña principalmente. Desde Coruña salieron varias tandas, unos salieron en bici el día anterior a las cuatro de la tarde desde la plaza de Maria Pita e hicieron noche en Pontedeume, donde durmieron en el pabellón polideportivo que gentilmente les cedió el concello, aproximadamente otros veinte fueron en tren el mismo día de la masa, sin que el personal de RENFE les pusiera ningún tipo de traba por pasarse del número máximo de bicicletas admitidas en los vagones, también el mismo día de la masa los más aguerridos “machakas” del grupo de Quintena hicieron ida y vuelta en bici.
Aunque la participación no fue tan numerosa como el año pasado en Santiago y no hubiese tantos medios de comunicación cubriendo el evento, quedó claro que el espíritu reivindicativo se mantiene. Iniciamos el paseo sobre las doce y media y fuimos paseando a lo largo de un recorrido total de unos 13 kilómetros por distintos barrios ferrolanos como Ferrol Vello, A Magdalena, O Ensanche, Ultramar e Caranza llegando incluso a Narón. No faltaron los timbres, silbatos, bocinas y cánticos que amenizaron como siempre nuestro recorrido. Finalmente llegamos hasta donde estaba planeada la comida-xuntaza en una agradable zona verde .
A la sombra de los árboles repusimos fuerzas y nos relajamos tumbados en la hierba. Aunque estaba propuesto un debate/asamblea para después de la comida, al parecer nadie lo echó en falta y se continuó con el relax; unos reposando la comida y charlando, otros jugando a una especie de “chave”, y otro nutrido grupo jugando una pachanga futbolera que estuvo de lo más reñida.
Pero todo lo bueno se acaba, y como además, gran parte de los presentes debíamos embarcar a las seis de la tarde de vuelta a Coruña, sobre las cinco y media nos despedimos de los anfitriones ferrolanos deseando que su masa mensual siga creciendo y emplazándonos para nuevas convocatorias conjuntas.
Llegamos al puerto de Curuxeiras con el tiempo justo de embarcar; primero todas las bicis y luego sus dueños. ¡¡ Menudo paseo de vuelta !!, el perfecto broche final, mar el calma, tarde soleada,… . Una hora y cuarto de perfecta travesía. ¡¡Y sólo por siete euros!!.
Finalmente atracamos en la Dársena del Parrote a las siete y media de la tarde.
Pienso que a la mayoría se nos hizo muy corto el trayecto y nos quedaron ganas de repetir reuniones como ésta.
Por Luis.
